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¿Cómo elegir tu tierra para cultivar Cannábis?

Bienvenidos a Cápsulas de Cultivo por Jotvox Hoy veremos cómo preparar una buena tierra o sustrato para cultivar marihuana.



En primavera, osea que es momento ideal de empezar a cultivar y germinar semillas de mota; y si lo que queremos es que esas plantas crezcan grandes y fuertes y que terminen dándonos flores gordas en otoño; es de suma importancia asegurarnos de que la tierra donde crecen sea ideal para el cultivo de cannabis.


Le decimos tierra, pero tierra es lo que está en el cerro y en el monte y que existe de forma natural con poca o nula intervención humana.


Lo que nosotros vamos a preparar es un sustrato, que es el medio en el que se van a desarrollar y crecer las raíces de la planta, que muchos pensarían es la parte más importante de la misma.


Sin una raíz sana y fuerte, no hay planta sana y fuerte ni tampoco flores ricas.


El sustrato no forzosamente tiene que ser sólido, la raíz también puede crecer en agua o hasta en aire siempre que reciba los nutrientes suficientes para desarrollarse. Este es el caso de los cultivos hidropónicos y aeropónicos, donde alimentamos la raíz directamente con nutrientes minerales ya sea en un depósito de agua en movimiento o atomizada creando una neblina.


También es el caso de los cultivos acuapónicos, que utilizan agua con peces y cangrejos y la popo de estos es lo que nutre a las plantas.


Sin embargo, la forma más sencilla de empezar a cultivar es en macetas con sustrato o tierra preparada.


Para cultivar cannabis, lo que buscamos es que el sustrato tenga una textura ligera y esponjosa, que no se compacte, para que la raíz pueda crecer sin batallar, buscamos también que tenga buena aireación para que la raíz respire, un buen drenaje para que la raíz no se ahogue ni se pudra,


también necesita una una buena retención de humedad y de nutrientes para que la raíz siempre tenga que comer; y, si cultivamos de forma orgánica con suelo vivo, también buscamos que el sustrato tenga la capacidad de albergar vida en forma de microorganismos y hongos benéficos.


También buscamos que tenga un pH de entre 5.8 y 6.5 y que esté libre de plagas.


Recetas para preparar un buen sustrato hay muchísimas, desde muy básicas hasta super avanzadas y específicas con ingredientes a veces muy difíciles de conseguir. Cada grower tiene su propia receta secreta que puede o no compartir con el mundo.


Yo hoy les voy a compartir una receta básica pero efectiva para hacer su propio sustrato para macetas con ingredientes bastantes fáciles de conseguir y sin romperse tanto la cabeza.


Nuestro sustrato se compone de 3 elementos principales:


Primero, Un suelo base, que compone entre el 40 y 60% de nuestro sustrato. Puede ser simple tierra fértil, tierra negra o una mezcla de tierras, puede ser turba o peat moss, o tierra de vivero con hojarasca y corteza de árbol.


Todos esos que acabo de mencionar se llevan bien con el suelo vivo y el uso de nutrientes orgánicos porque contienen carbono que ayuda a las bacterias y microorganismos a proliferar, pero también podemos optar por usar una base inerte como la fibra de coco,


esta fibra no tiene nutrientes ni los alcanza a almacenar bien, por lo que la planta necesitará que nutramos con sales minerales, similar a un sistema hidropónico.


En mi caso,voy a usar turba rubia o peat moss como base. Esta turba viene de musgo canadiense, aunque también lo pueden encontrar en xochimilco.


La turba es muy ligera y retiene muy bien tanto el agua y el aire. Por sí sola suele tener un ph muy ácido, por lo que casi siempre debe ser tratado con limo para aumentar su ph y que sea apto para el cultivo. Aunque la turba es muy efectiva como base para el cultivo, no es muy sustentable porque nos la acabamos mucho más rápido de lo que se genera y porque dañamos los ecosistemas de donde se cosecha para fines comerciales. Al mismo tiempo la fibra de coco tampoco es muy sustentable que digamos porque tiene que procesarse con muchísima agua antes de poder usarse para cultivar.


Las mezclas de tierra pueden ser mejor opción pero hay que asegurarse de que estén libre de patógenos y de hongos que afectan a la planta.


Este de aquí por ejemplo, es tierra de jardín o de parque, o del patio de tu tía, de donde crecen árboles.


Aunque a simple vista se ve bien y hasta tiene hojarasca lo cual es bueno,esta tierra saqueada suele tener una textura pésima para cultivar weed, está muy dura, se enloda fácilmente y simplemente la planta no podrá crecer bien su raíz.


Además es mala idea traer esta clase de tierra a tu casa arriesgando traer una plaga no deseada a tus plantas.


El 2do elemento de nuestro sustrato, es un material aireador, osea, algo que vuelva más ligero mi sustrato, algo que tenga granos más grandes por donde pueda drenar el agua más fácilmente al mismo tiempo que guarda más aire para que las raíces puedan respirar.

Este elemento debe componer entre el 10 y el 40% de nuestro sustrato, entre más compacto y duro sea nuestra tierra base, más elemento aireador deberemos agregar.


Los materiales más comunes para usar como elemento aireador son la perlita y vermiculita, que son minerales y rocas procesadas a altas temperaturas que dan como resultado estos granos super ligeros y porosos que retienen muy bien la humedad, dejan drenar el agua y guardan espacio para el aire.


Otra opción menos procesada, aunque más costosa, es usar pumita, también conocido como tepojal, piedra volcánica o piedra pómez.


La fibra con polvillo de coco también nos sirve como elemento aireador que también retiene muy bien la humedad. Si usamos una tierra compacta como base, se recomienda usar fibra de coco combinado con perlita o piedra volcánica como elemento aireador.


El tercer elemento de nuestro sustrato, es un material nutritivo que aporta nitrógeno, fósforo y potasio junto a bacterias y microorganismos que ayuden a procesar los nutrientes a una forma más biodisponible para la planta.


El elemento nutritivo ocupa entre el 10 y 25% de nuestro sustrato y los materiales más usados son el humus de lombriz, composta, vermicomposta, gallinaza y guano de murciélago.


Otros materiales más avanzados incluyen el guano de ave marina, bokashi, harina de crustáceos, de hueso, de alga, de pescado y de ostión, etc.


En nuestro caso vamos a usar humus de lombriz, que es muy económico y que hasta podemos hacerlo nosotros mismos con un lombricompostero.


Siendo más específico, nuestra receta de sustrato básico estará compuesto de 40% turba (aunque pueden combinarlo con tierra negra por ejemplo), 15% piedra pome de granos grandes, 10% de perlita de grano fino, 5% de fibra de coco, bien poquito porque ya estamos usando turba (y esto nos da un total de 40% de material aireador) y finalmente 20% de humus de lombriz.


Todo esto lo revolvemos bien y tenemos como resultado un sustrato ligero, esponjoso y no tan cargado de nutrientes ideal para empezar a cultivar desde semilla y así no quemar a nuestra plántula por exceso.

Existen muchos otros ingredientes que podemos agregar a esta mezcla para hacer una receta más completa y avanzada.


Está, por ejemplo, la receta de súper suelo de subcool que incluye polvo de roca glaciar, harina de alfalfa, de algas, de hueso, de sangre, dolomita, ácidos húmicos, sales de epson y micorriza que es un hongo benéfico que hace simbiosis con la raíz.


Yo le voy a agregar poquita micorriza arbuscular a nuestro sustrato.


Si hacer su propio sustrato se les hace mucha lata, pueden optar por adquirir un sustrato ya preparado y pensado para cannabis en su tienda de cultivo favorita, o con su grower buena onda favorite.


Hay varias buenas opciones, solo están atentos a que tengan bien clara la lista de ingredientes con los que está hecho, que esté limpio y que sepan que lo resguarden en un lugar idóneo con poca humedad. Desconfíen del sustrato regalado, ese que les da su compa porque le sobró, ustedes no saben cuánto tiempo estuvo guardada esa tierra ni en qué condiciones y puede que venga contaminado con hongo pythium, que no se ve a simple vista y que va a terminar matando a todas las plantas que pongan ahí. Ya me pasó y es muy feo.


Y eso es todo, ya sea que sigan esta receta o la perfeccionen con otros materiales que tengan a la mano, mientras su tierra tenga la textura ideal, su raíz puede explotar y crecer hasta colonizar la maceta entera siempre que la alimentemos bien,


con este sustrato podemos usar cualquier tipo de nutrientes ya sea orgánico o mineral o de suelo vivo, y podremos obtener una buena cosecha con plantas del tamaño que queramos siempre y cuando la planta reciba suficientes horas de luz. Muchas gracias y hasta la próxima cápsula.



Checa la info en Video Vlog X Jotvox Youtube.


@BeibiGrower

Carlos Illan

Capsulas de Cultivo x Jotvox

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